Cuando los momentos tienen sentido, cuando la realidad está llena de él, es fácil escribir porque entonces, hacerlo, solo es dejar que la mano se haga extensión de la mente y de las viviencias. Es lo que me ha pasado a mi en estas circunstancias.
Solo el viento
Deja que e viento
se cuele por tus dedos.
No temas que ese viento
te haga cerrar los párpados
y, entreabiertos,
filtres la luz,
moldees los perfiles
y te posean las sombras,
sombras de luz,
y que nunca, ojalá,
lo sean de tinieblas.
Rostro al viento,
pecho al viento,
todo tú al viento
que enredará tu pelo:
ondeante bandera
hecha palabra
silenciosa y rotunda.
Te trajo el viento
y en él nos encontramos.
Con viento hemos hecho
historia y andadura.
Y en viento, hecho susurro,
seguiremos oyéndonos,
seguiremos tocándonos,
seguiremos sintiéndonos.
Viento, no más,
sacramento de Dios,
presencia que se palpa
de su estar con nosotros.
Que el viento esté contigo
y con nosotros.
El viento, siempre el viento,
todo el viento,
solo el viento.
José Luis
2 comentarios:
Que el viento esté contigo
y con nosotros.
El viento, siempre el viento,
todo el viento,
solo el viento.
Hombre Pájaro...
MT.
Nos mantendremos muy unidos en el camino por el viento y también por la cuerda.
Gracias por los abrazos, Profeta...
CA.
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