Se lo escondes a los sabios y entendidos (Mt 11, 25)
Si alguno desea ser el primero, será el último (Mc. 9,35)
El que quiera ser el primero, que se haga servidor de todos
(Mc 10,44)
Dichosos los sencillos… (Mt 5)
Hoy he empezado con las citas evangélicas que anteceden porque pensaban
si los “cristianos” no tendremos un problema de comprensión idiomática.
El evangelio de hoy, a mi juicio, insiste en algo que ha venido
perfilando en las semanas anteriores. Y es que, con el paso del tiempo, de los
siglos y de la Institución, hemos domesticado la fuerza de esta Palabra y la
hemos acomodado a los intereses que, desde una cultura determinada, han
impuesto su vigencia, de tal manera, que
la levadura no se metió en la masa y ni la transformó ni la fermentó, es más,
en muchos, muchísimos casos, quedó neutralizada.
Por eso las palabras de Jesús calan en los sencillos, hay que ser
sencillos.
Pero
sencillo no es “simple”. Sencillo es el que no tiene recovecos frente a esa
palabra, se deja interpelar por ella y en ella se sumerge. Pero no el “simple”
que le achaca a Dios todo lo que ocurre movido por los poderosos.
Intentaré
aclararme:
Dice
el evangelio : “Mi yugo es suave y mi carga ligera”. Y me atrevo a pensar que a
muchos no nos parece suave el asumir el evangelio y sentimos su carga
aplastante.
Entonces,
¿en qué quedamos? Pues sencillamente en aceptar, en primer lugar, que la opción
por el evangelio son palabras mayores. Pero, ¿entonces Jesús nos engatusa?. No.
Y ahí es donde creo que hemos deformado
el contenido de la Buena Noticia.
Jesús
dice “cansados y agobiados”. Cansados y agobiados por el Evangelio. Luego
reconoce la dificultad. Pero continúa: “Los cansados y agobiados (por el
Evangelio) venid a mi” es decir, sumerjámonos en la Humanidad Nueva que él está
abriendo..
Y
cuando pongamos en valor ese ir a él, sin justificaciones filosóficas de sabios
y prudentes, , sin que desaparezca la
dificultad, aparecerá el alivio,
el sentido pleno, el descanso para nuestras vidas .
Pablo
lo sintetiza en el final del texto de hoy: “Los que se guían por el Espíritu de
Dios, esos son hijos de Dios”
José Luis
Molina
4 de julio
del 2020
No hay comentarios:
Publicar un comentario