viernes, 1 de noviembre de 2013

LLAMADOS A SER SANTOS





Al mismo tiempo que fui descubriendo que estábamos llamados a la santidad, descubrí que a ésta no la vamos a encontrar entre las nubes de algodones  por donde se pasean los angelitos de Murillo, sino en y desde la vida real y concreta.

Por eso la vida me sirve de referente, se convierte en “sacramento” de  esta santidad y en ella descubro miles de “sacramentos” .

Con uno de estos, desde mi casa, en El Bosque, quiero abrazaros
                        
                                  José Luis



LLAMADOS A SER SANTOS

Mirando al olivo
y pensando en ustedes

Ahí está,
tras la ventana,
desafiando al monte
que intenta intimidarlo
por la espalda,
mi olivo sempiterno.

Mi olivo
dobla cada mañana
débiles ramas
cargadas de aceitunas.
Llevan el peso
del sol y de la luna,
de la lluvia y la seca.
Su verde
es sueño verde,
sueño de campesino
que fue siendo otra cosa:
campesino de sueños,
cosechador de esperas
y vareador de estrellas.
Sus olivas,
verdes y negras
como lo es la vida,
asoman maduradas:
las maduró el amor,
joven y denodado,
que, a su sombra,
se vistió de azul
y se hizo cielo.

Ese olivo,
mi olivo, nuestro olivo,
que nos llama
a ser rama de triunfo,
corona de victoria,
vítores de alegría
y ajorcas de la fiesta.

¡Qué bien queda,
sobre la blanca túnica,
verde la rama
de la sangre nueva
que salpica hasta el cielo
y hace que las estrellas
se hagan rojas
de amapolas de huertas!
              
                 Felicidades
 José Luis Molina



Descripción: SAM_3476




1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias por la felicitación y tu cariño siempre presente, espero no te olvides de traernos unas aceitunas...
Y mi deseo para tí, como diría Benedetti... Y TAMBIÉN VICEVERSA!!! un abrazote.