sábado, 25 de febrero de 2017

BRUMA  Y   TIEMPO




Entre la bruma, el tiempo.
Entre la bruma, la vida.
Veinte años ya, veinte años fueron.
Veinte años de bruma,
veinte años de vida,
bruma y vida en ese tiempo.
¡Bruma!
en aquel amanecer de la partida,
bruma desdibujando
los perfiles y los contornos
que atrás se quedaban,
bruma húmeda de lágrimas,
bruma callada
de quejidos reprimidos.
Bruma en el tiempo
contemplado con lágrimas,
con lágrimas fértiles
que siempre fecundaron,
lágrimas hechas bruma
en nuestros ojos
por la vida que duele,
por el dolor que engendra vida,
por la vida amasada
con dolor, con ansia, con . . . espero.
También el Pululahua
nos oculta, entre brumas,
insinuando apenas
su vientre fecundo,
para,en un momento,
levantarla al cielo
haciéndola arco iris
que abraza el verdor de su seno.
Así también, las brumas,
que se hicieron de lágrimas,
en profundo portento,
conviértense en sonrisas,
en brillos y destellos
de amor, de vida compartida,
de andaduras y esfuerzos,
de comunión y apoyo,
sosteniendo mi tambaleo,
nuestros tambaleos.
Y en este momento,
en estos veinte años
de camino, canto y tropiezos,
yo os ofrezco la bruma de mis sueños
que siempre, siempre, siempre,
en mí tuvieron
la esencia de ser vida.


         José Luis Molina
                                25 de febrero del 2017

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias por tú oferta diaria, concreta, por enseñarnos a ver la bruma y el paraíso detrás de ella...