martes, 29 de enero de 2013

PRESENCIA

Para todo aquel que considere
que puede estar dedicado para él.




No estoy ausente
porque no me veas.
Porque encuentres vacía
de sombra mi sombra,
no me he ido.
Porque el sonido
se ha quedado hueco
de mi voz,
no he desaparecido.

Me habré ido,
mi ausencia será incuestionable,
ya no seré
a no ser que llamemos
ser a ser desaparecido,
cuando ya no me vivas,
cuando no nos vivamos
vivéndonos en la unidad de ser
que sólo da la vida.
Porque es en la vida
donde la vida
se hace transparencia de cristal,
y calor de madera
y samotracia alada
donde hasta el mármol vibra.

José Luis Molina

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Peregrino de Cabeza Nevada:

Me considero afortunada y considerada dentro del contexto de tus palabras ¿qué más puedo pedirle a la vida? si ha sido tan generosa conmigo al ponerte en mi camino y saborear de tu misericordia, de tu encuentro con abrazos abiertos y sinceros, de tu amistad, de tu cariño, de tu generosidad, de tu confrontación que no me ha condenado, ¡cómo no vas a estar presente en mi vida, marcada por tu toque de cristal y calor de madera!.
Anita Troya

Anónimo dijo...

Gracias José Luis por ser parte de tu vida y gozar de tú experiencia, como lo manifiestas en el poema.
Carmen A.

David dijo...

Me encanta leer buenos poemas y distintos textos literarios. Como ya tengo mis Vuelos a Quito para el próximo verano, planeo disfrutar de autores de dicho país, ya que no tengo mucha idea de esas personalidades