domingo, 5 de octubre de 2014

SOLO EL VIENTO

Cuando los momentos tienen sentido, cuando la realidad está llena de él, es fácil escribir porque entonces, hacerlo, solo es dejar que la mano se haga extensión de la mente y de las viviencias. Es lo que me ha pasado a mi en estas circunstancias. 

Solo el viento

Deja que e viento
se cuele por tus dedos.
No temas que ese viento
te haga cerrar los párpados
y, entreabiertos,
filtres la luz,
moldees los perfiles
y te posean las sombras,
sombras de luz,
y que nunca, ojalá,
lo sean de tinieblas.
Rostro al viento,
pecho al viento,
todo tú al viento
que enredará tu pelo:
ondeante bandera
hecha palabra
silenciosa y rotunda.
Te trajo el viento
y en él nos encontramos.
Con viento hemos hecho
historia y andadura.
Y en viento, hecho susurro,
seguiremos oyéndonos,
seguiremos tocándonos,
seguiremos sintiéndonos.
Viento, no más,
sacramento de Dios,
presencia que se palpa
de su estar con nosotros.
Que el viento esté contigo
y con nosotros.
El viento, siempre el viento,
todo el viento,
solo el viento.

José Luis

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Que el viento esté contigo
y con nosotros.
El viento, siempre el viento,
todo el viento,
solo el viento.
Hombre Pájaro...
MT.

Anónimo dijo...

Nos mantendremos muy unidos en el camino por el viento y también por la cuerda.
Gracias por los abrazos, Profeta...
CA.