Nos alegramos por la PAZ en Colombia
De las espadas
forjarán arados,
de las lanzas, podaderas.
No alzará la espada pueblo contra pueblo,
no se adiestrarán para la guerra.
de las lanzas, podaderas.
No alzará la espada pueblo contra pueblo,
no se adiestrarán para la guerra.
Se ha firmado, luego
de 52 años de conflicto armado, la PAZ en Colombia, nuestro país vecino y nos
alegramos inmensamente por ellos. Como
cristianos no puede sernos indiferente este acontecimiento y menos aun cuando
hemos sentido de cerca el sufrimiento de su gente que fue convirtiéndose en
nuestra gente por el refugio que debieron buscar en nuestra tierra, a veces mal recibidos por ese sesgo de
discriminación creciente en este mundo deshumanizante.
Nos alegra, sí, realmente
nos alegra y nos conmueve. Por ello auguramos que el futuro se llene de
esfuerzos para curar las heridas, que
esos esfuerzos sean capaces de mermar la influencia de personajes que mediados
por la venganza se niegan a abrir las puertas a la PAZ.
En Intiruna,
afianzamos nuestra oración y anhelos para que la paz se mantenga y desde un
accionar concreto en los espacios de formación nos comprometemos a educar por
esa PAZ que llega a Colombia, pero que también queremos para otras regiones del mundo
como Siria y otros lugares del planeta que no aparecen en las pantallas de los
grandes noticiarios porque simplemente no interesan a los poderosos.
¡Qué viva la PAZ en
Colombia! Y qué venga la PAZ para SIRIA!
Marcia Toca
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